lunes, 27 de octubre de 2014

Relajación profunda en yoga / CENTRO DE YOGA Y RELAJACION MAITREYA / ALCORCON

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                ¿Qué es la relajación profunda en yoga?

La relajación profunda, o yoga nidra, es un ejercicio que relaja el cuerpo y la mente y te ayuda a sentirte renovada. Los expertos en yoga creen que practicar este tipo de yoga durante una hora equivale a cuatro horas de sueño. Esto es difícil de demostrar, pero muchas mujeres encuentran el yoga nidra muy útil para relajarse.

¿Cómo puede ayudarme la relajación profunda?

Los expertos en yoga aseguran que el yoga nidra puede:
  • ayudarte a estar más consciente de tu cuerpo
  • ayudarte a sobrellevar el cansancio y la falta de sueño
  • relajarte y reducir tu estrés
  • mejorar tus náuseas

Todo esto te ayudará a mantener una actitud positiva durante el embarazo. Una vez haya nacido tu bebé, puedes practicar yoga nidra mientras tu pequeño duerme para reducir tu estrés o superar tus preocupaciones cotidianas.

¿Cómo puedo relajarme?

El yoga nidra es una técnica de relajación sencilla, pero requiere práctica. Habla con un profesor de yoga prenatal cualificado para que te enseñe a hacerlo correctamente. Te ayudará a escoger una postura cómoda y segura para tu etapa del embarazo.

Practicar el yoga nidra involucra echarte de espaldas en la postura del muerto o Shavasana. Sin embargo, después de las 16 semanas de embarazo, deberías echarte sobre el costado, preferiblemente sobre el lado izquierdo, porque cuando te echas sobre la espalda, el peso de tu bebé puede presionar tus arterias principales, reduciendo el flujo de sangre hacia el útero.

Haz lo siguiente para beneficiarte al máximo de una sesión de yoga nidra:
  • escoge un lugar tranquilo
  • si lo deseas, pon música suave o prende un palito de incienso aromatizado
  • asegúrate de que la habitación no esté caliente y el aire no esté viciado
  • apaga la TV y tu teléfono móvil
  • viste ropa suelta y cómoda
  • échate sobre una alfombra o tapete de yoga
  • usa almohadas y cojines para sentirte cómoda y proporcionar apoyo a tu pancita
  • cúbrete con una manta porque la temperatura corporal baja durante la relajación

Cierra los ojos y relaja lentamente cada parte de tu cuerpo, desde la punta de los dedos de los pies hasta la cabeza. Una vez lo hayas hecho, sigue el camino inverso, y relájate desde la cabeza hasta los pies. Inhala y exhala profunda y suavemente por la nariz a medida que vas transfiriendo tu enfoque de una parte del cuerpo a la otra.

Mientras inhalas, llena tu mente de pensamientos positivos como "Estoy tranquila", "Soy feliz" o "Le doy la bienvenida a mi bebé". Trata de ignorar cualquier pensamiento negativo o preocupación. A medida que te relajas, enfoca tu mente en tu cuerpo en reposo.

Mientras exhalas, saca de tu cuerpo y de tu mente toda negatividad. Siente una ola de relajación a medida que pasas de una parte del cuerpo a otra. Una vez te hayas acostumbrado, quizás podrás enfocarte en todas las partes de tu cuerpo varias veces antes de perder la concentración.

Cuando termines tu sesión, mantente en este estado de relajación durante más o menos cinco minutos y abre tus ojos lentamente. Levántate con movimientos suaves para no perder tu relajación interna.

Al principio, quizás te costará deshacerte de los pensamientos y las preocupaciones que llenan tu mente. Quizás te resulte difícil mantenerte despierta y enfocarte en tu cuerpo, o incluso puede que te duermas. No te obsesiones con que te salga perfectamente cada vez que lo intentas. Simplemente relájate y enséñale a tu mente a concentrarse.

Para ayudarte a despejar la mente, puedes tratar de enfocarte en un solo punto mientras mantienes los ojos cerrados. Puede ser el centro de tu frente o el entrecejo. Con el tiempo, puedes aprender a relajarte tanto que tu mente se liberará de pensamientos, imágenes y emociones.

¿Cuándo debería hacer mis ejercicios de relajación?

Quizás te serán más fáciles si eliges un momento en el que tu nivel de energía es bajo. Es mejor planear tu sesión tres o cuatro horas después de una comida grande, o un par de horas después de haber comido un tentempié. Una sesión de yoga nidra al principio dura entre 15 y 20 minutos. A medida que practiques más, quizás podrás alargar cada sesión hasta que duren entre 40 y 60 minutos.