Cómo el pensamiento positivo construye tus competencias, aumenta tu salud y mejora tu trabajo. Mucho
se ha escrito sobre el pensamiento positivo y es de todos sabido que es
positivo ser positivo, valga la redundancia. Sin embargo el pensamiento
positivo es un término difuso, tanto en su aplicación, como en su
definición, sus verdaderos beneficios y su importancia.
Al mismo tiempo, el ser positivo es relegado a segundos planos si lo
comparamos con conceptos como practicidad o productividad en el lugar de
trabajo, por poner un ejemplo.
Aunque esta visión puede empezar a cambiar, gracias a las últimas
investigaciones l
levadas a cabo por diferentes disciplinas como la psicología,
así como por prestigiosas instituciones de investigación. Estas
investigaciones empiezan a demostrar que el pensamiento positivo y la
actitud que conlleva son mucho más que el mero hecho de ser feliz, ya
que el pensamiento en positivo realmente puede llevar aparejado un
verdadero valor a tu vida y generar competencias más allá de una simple
sonrisa.
El pensamiento positivo y nuestro cerebro.
La investigación psicológica
sobre los pensamientos y su impacto llevado a cabo por la North
Carolina University han testado el impacto de las emociones positivas en
nuestro cerebro a través de numerosas investigaciones.
Durante uno de ellos, los sujetos fueron divididos en cinco grupos a
los que se les expuso a fragmentos diferentes de películas. A los dos
primeros grupos se les mostró fragmentos relacionados con emociones
positivas, como la alegría y la satisfacción. Mientras que al grupo
número 3 se les mostró imágenes sin carga sentimental significativa. Y a
los dos últimos grupos se les expuso a imágenes con contenido
claramente negativo, como el miedo, la rabia y la ira.
Tras esta exposición, se les pidió a cada sujeto que escribiesen cual
sería su reacción ante cada una de las situaciones. Los participantes
expuestos a imágenes negativas, fueron los que dieron respuestas más
escuetas, mientras que los grupos sometidos a las positivas dieron
respuestas largas y completas, por encima del grupo neutral.
Demostrándose que cuando las personas somos sometidas a situaciones
positivas, se amplían significativamente las posibilidades, la visión y
las oportunidades en nuestro día a día.
Cómo el pensamiento positivo construye tus competencias.
Una de las características más importantes del pensamiento positivo
no es el mero hecho de sentirse bien durante un rato, sino que éste
puede ayudarnos a generar y aumentar nuestras aptitudes y competencias.
En el caso de un niño que corre y juega, se relaciona con amigos
(competencias comunicativas) y se ejercita (aptitudes atléticas),
acciones relacionadas con la felicidad, la satisfacción, el
compañerismo, amistad… tendrá mayores posibilidades en un futuro de
alcanzar competencias importantes para el día a día. Estas competencias
duran mucho más que las emociones que las generaron.
Según estos estudios, esta capacidad para generar competencias a
través del pensamiento positivo se denomina como la teoría de “ampliar y
construir”, ya que las emociones positivas abren la mente y ofrecen
nuevas oportunidades. En relación a las emociones negativas, éstas
generan sentimientos completamente opuestos, el miedo por ejemplo impide
ver con claridad e induce a respuestas automáticas de autoprotección y
defensa.
Felicidad y éxito ¿cuál viene primero?
No hay duda de que parte de la felicidad puede venir a través de la
consecución de éxitos, ya sean personales o profesionales. Estos logros
aportan felicidad y satisfacción, aunque es erróneo considerar que es el
éxito el que necesariamente aporta felicidad. Sin embargo la teoría de
“ampliar y construir” prueba que es necesario crear antes competencias y
aptitudes, a través de una actitud y pensamientos positivos, para poder
llegar a conseguir el éxito.
En otras palabras, la felicidad es ambas, la precursora y el
resultado. De hecho, los investigadores han podido constatar un efecto
de espiral, que suele relacionarse con personas positivas. Estas
personas son felices, así desarrollan nuevas competencias, conocimiento y
aptitudes, esas competencias les conducen a nuevos éxitos, conducentes a
nuevas situaciones de felicidad y realización.
¿Cuál sería el camino a seguir?
Es genial simplemente sentirse “feliz”, sin embargo esos momentos de
felicidad son críticos para abrir la mente y explorar y crear nuevas
competencias y aptitudes, que pueden ser fundamentales durante tu vida.
Encontrar maneras de construir emociones positivas, ya sea a través del
juego, de pasar tiempo con la familia y amigos, meditando, escribiendo,
riendo… puede garantizarte mucho más que una simple reducción del
estrés.
Los períodos de emoción positiva y exploración sin trabas, se
producen, sientes las posibilidades de cómo tus experiencias pasadas
encajan en tu vida futura, cuando se empieza a desarrollar habilidades
que florecen en forma de talentos útiles más adelante, y cuando
despiertas el impulso para explorar y encaminarte a nuevas aventuras. En
pocas palabras: buscar la alegría, jugar a menudo, buscar una nueva
aventura. Tu cerebro hace el resto.