miércoles, 3 de mayo de 2023

TODO LLEGA A SU TIEMPO | Esto Te Dejará Sin Palabras | (Deepak Chopra)

                        


Lo que tenga que ser será, a su tiempo y en su momento

Hay un momento justo para cada cosa, por lo que no debemos apresurarnos ni agobiarnos por conseguirlo. Si somos pacientes, podemos estar seguros de que lograremos lo que deseamos.

 

Lo que tenga que ser será, a su tiempo y en su momento. Lo único que necesitamos es, sin duda, una pizca de paciencia y, ante todo, la clara voluntad de seguir construyendo nuestro presente día a día para alcanzar dicho objetivo.

 

De esta frase se deducen varias ideas. La primera es que, en ocasiones, forzar las cosas para que sucedan antes de tiempo no trae buenos resultados.

La segunda es que las personas debemos ser capaces de aceptar que la vida tal como se nos presenta la existencia  tiene sus ciclos, sus instantes.

Cada cosa tiene su momento, y todo momento tiene su oportunidad

En ocasiones, las cosas buenas suceden porque sí, pero podríamos decir que, el resto de veces, lo bueno acontece porque es el momento y ante todo, porque nosotros mismos lo hemos propiciado con nuestro esfuerzo

Lo que tiene que ser será, si nosotros lo propiciamos también

Las oportunidades no suelen llamar así como así a la puerta de nuestra casa. La inmovilidad  no atrae la oportunidad, ni el simple deseo nos regala porque sí los sueños que diseña nuestra mente.

  • “Lo que tenga que ser” requiere también un esfuerzo por nuestra parte. Somos agentes creadores, entidades capaces de cambiar nuestra realidad y de propiciar oportunidades siempre y cuando nos lo propongamos.
  • Hay cosas que acontecen porque es el momento, es cierto, pero si nosotros mismos no hemos puesto algo de voluntad, esfuerzo y dedicación difícilmente aparecerá ante nosotros aquello que deseamos.

La importancia de mantener una mente abierta

Una mente abierta no es solo una mente que sueña bajo las estrellas lanzando deseos al infinito. Una mente abierta tiene características muy concretas:

  • Es consciente de sus necesidades.
  • Tiene una buena conexión consigo misma, un buen autoconcepto y autoestima  para ser capaz de poner límites ante lo que no desea y extender sus redes ante aquello que sí quiere.
  • Es observadora, escucha todo lo que tiene a su alrededor y elige aquello que le pueda permitir crecer y seguir avanzando.
  • Una mente abierta y receptiva sabe aprovechar el momento e invierte energías y conocimientos para que las oportunidades lleguen a ella cuando sea el instante más propicio.

La paciencia es parte fundamental de una vida equilibrada.

Quien se adelanta, se arriesga sin valorar antes los peligros y carece de paciencia suele llevarse más de una desilusión o desengaño.

Sabemos que a veces nos cansamos de esperar a que las cosas buenas, aquellas que merecemos, hagan acto de presencia. Hasta que eso ocurra, no debemos olvidarnos de confiar en nosotros mismos y en nuestras capacidades.

DEBEMOS SEGUIR LUCHANDO POR NUESTROS PROPÓSITOS Y, A SU VEZ, SER RECEPTIVOS PARA QUE LAS COSAS, FINALMENTE, SUCEDAN. NO TE RINDAS ANTES DE TIEMPO: MANTENTE SIEMPRE CON LOS OJOS Y EL CORAZÓN ABIERTOS.